Votar sin esperanzas. Lo que sienten la mayoría de los Argentinos.
A horas del ballotage la sensación es que, gane quien gane, la educación, la salud y la inseguridad van a seguir igual o peor.
Ninguno de los dos candidatos que vamos a encontrar en el cuarto oscuro explicaron qué van a hacer para mejorar estos temas: temas que no pueden esperar.
Vouchers sí o vouchers no, esa fue la pelea. Pero ni el actual Ministro de Economía ni el libertario explicaron en detalle qué van a hacer.
Quedaron atrás las esperanzas de un pueblo que creía que al cambiar el gobierno iba a estar mejor. Pocos son los argentinos que creen realmente que estos candidatos van a cambiar la realidad.
Massa ya demostró con sus hechos que "cualquier colectivo le queda bien": desde meter preso a los "ñoquis" de la Cámpora a llevar sus referentes en las listas.
Milei, quien ganó popularidad y dió la sorpresa en las PASO, bajó el tono y desmintió las propias propuestas que lo hicieron lo que es: un presidenciable. Pasó de criticar a la "casta" a pactar con Macri y a cerrar su campaña con Bullrich.
A pesar de todo, no podemos dejar de valorar la democracia que tanto nos costó. Elegir un candidato o votar en blanco es un derecho democrático que no podemos desestimar.
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